12ene09.- Esta frase la he escuchado seguido los últimos 3 años más o menos, en boca de mucha gente de Simposium. La verdad primero me chocaba, luego me fue indiferente y al final me parecía respetable con sus reservas.
Pero hoy vi que Alejandro Maldonado, el yoga teacher como muchos le dicen, la utilizó en su 'frase de la semana' en HOY. Platicó acerca de la mente y quiero citarlo textualmente.
Cito: "...entrenando el cerebro para no dejar que la mente nos haga trampas y nos jale hacia atrás. Atorándonos en situaciones pasadas, buscando pretextos, repitiendo conductas, encontrando motivos negativos, perdiendo el tiempo. Vamos a traer la mente aquí, al día de hoy, al presente. Vamos a oxigenarla para transformar el pensamiento y pasar probablemente de alguna idea pequeña y angustiosa que tenemos, a una grande y liberada. Vamos a pasar de la idea a la acción y a sacarle jugo al tiempo, así que vamos a ver el lado bueno de las cosas, a encontrar soluciones prácticas y funcionales y a motivarnos para conseguir ese cambio que tanto nos vendría bien. La mente juega un papel muy importante, tanto para avanzar como para evitar repetir conductas inadecuadas, es ideal tomarnos un tiempo todos los días para entrenar al pensamiento. Reflexionar y dirigirlo hacia arriba, hacia el bienestar, acostumbrárnos a pensar en grande, a darle una dirección a nuestra energía y mantenernos ocupados, productivos. Vamos a entrenarnos..."
La verdad lo que dijo me cayó como anillo al dedo, que finalmente mi condición básica es de resentimiento y las mañanas luego eran las peores porque amanecía pensando en el pasado, en lo que me dolió y conforme pasaba el día lo iba sanando hasta que llegaba la noche y me sentía liberada y así al otro día y al otro día... (y me pregunto luego porque estaba gordita :o)
Pero hoy precisamente amanecí otra vez con el ego tratandome de jalar al pasado, sutilmente diciendo lo que me hizo daño, y ver a Maldonado diciendo que yo tengo que entrenar a mi mente y no ella a mi fue como la cachetadita que necesitaba para no dejar pasar un segundo más esas ideas resentidas. Así que me sacudí al ego y empecé mi día de la mejor manera que puedes hacerlo: agradeciendo y ofreciendo. Falta la otra mitad del día pero ahora estoy más consciente que irme para atrás según yo para ser más fuerte no es real, lo real es mi presente, siempre mi presente porque ahí es en donde Dios puede actuar con toda su grandeza y así deseo que sea.
Para atrás... ni para tomar impulso
Posted at 13:10 | Etiquetas: Simposium, Spiritual New Age, Vida cotidiana |
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